Como Comprar Mi Primer Equipo
GUIA PARA INICIARTE EN EL KITEBOARDING Y PARA COMPRAR TU PRIMER KITE
En el mercado de kites hay una amplia variedad de equipos, nuevos y usados, de diferentes marcas, modelos, niveles de seguridad, medidas, características y generaciones. También hay variadas posibilidades de compra, incluidas las compras a distancia por internet. Cuando surge la inquietud o la curiosidad por el kite, lo fundamental es ir a la acción, es decir: dedicar los primeros esfuerzos a aprender y practicar el deporte, no a ir de shoping. Comprar un kite para tenerlo en el baúl, para romperlo durante el aprendizaje o para tener que cambiarlo porque no es el adecuado, no suele ser una buena decisión. La compra de tu primer equipo debe ser un acontecimiento posterior al de haber tomado un curso básico o introductorio de unas pocas horas, que te brinde algún tipo de capacitación para decidir sobre la posterior compra. Los kites que se usan en un curso son acordes a tu nivel de aprendizaje y se van adecuando a tu grado de evolución. El kiteboarding es un deporte único, que se disfruta muchísimo y es relativamente fácil de aprender, no obstante ello y así de fácil, puesto en manos de un inexperto o de un autodidacta puede ocasionar riesgos físicos propios o a terceros, convertirse en un arma mortal – elevarte por el aire, arrastrarte peligrosamente o golpearte contra el piso o algún obstáculo como si fueses la cola de un látigo.
Para aprender Kitesurfing no se necesita ninguna habilidad especial, lo importante es entrenarse adecuadamente en los sistemas de seguridad, que necesariamente debe tener tu equipo. En un curso de kite aprenderás a lanzar y bajar el kite, a eyectarlo como un acto reflejo casi instantáneo, a auto rescatarte en el agua, a decidir los lugares aptos para subir o bajar un kite, a considerar las condiciones meteorológicas adecuadas y sobre todo el equipo acorde a tus condiciones, peso y zona en la que lo vas a usar. Recién en este punto vas a estar en condiciones de decidir adecuadamente sobre tu compra.
<adsense client="pub-3202245257259727" slot="6968837168" width="728" height="90"/>
Es importante que sepas que aprender solo o con la ayuda de algún amigo, si bien en el mejor de los casos te capacitará para el manejo del kite y de la tabla, muy difícilmente te forme en el tema de seguridad y supervivencia, que es un tema de evolución constante y permanente.
Los tres accidentes con consecuencias mortales, ocurridos en Argentina entre 2006 y 2008, fueron protagonizados por kiters que suponemos que por conocer los deportes de agua (provenían del windsurf), subestimaron las condiciones meteorológicas, las condiciones físicas riesgosas del lugar y en ningún momento previo a la zozobra intentaron eyectar el kite. Tal vez por no haber estado entrenados en realizar esa práctica en el primer instante de un comportamiento inadecuado de la cometa o simplemente porque no lo tuvieron internalizado como un acto reflejo.
En el terreno de las imprudencias se pueden enumerar la de no tomar un curso de capacitación en una escuela de kite que cumpla con los estándares internacionales de enseñanza y seguridad, la de comprar un equipo sin asesoramiento de un instructor al que seguramente deberás pedirle que te lo regule correctamente para tu uso, la de no utilizar casco y chaleco de flotación (al menos durante el primer año que es el de mayor exposición a riesgos) y la de no observar las restricciones a la navegación.
Debes tener presente que comenzar mal te puede ocasionar un golpe que en el mejor de los casos te alejará de la posibilidad de practicar un deporte alucinante, no importa tu edad ni tu aptitud para otros deportes, importa la forma en que te inicies. Si esta lectura te llega con retraso, después de haber comprado un kite, te recomendamos que se lo acerques a tu instructor o a cualquier escuela de Kite Homologada por la AAK, quienes lo regularán o acondicionarán (aunque sea totalmente nuevo) para que no corras riesgos innecesarios.
Autor: Alberto C. Anido – Presidente de la AAK. Nacido en 1950 y receptor de transplante hepático en 1999. Kiter desde el 2002.
Artículo extraido de web oficial de AAK.
Ir a Kitesurf